Energía desde la raíz

Hay decisiones pequeñas que cambian el rumbo de nuestro día… y luego están las decisiones conscientes, esas que transforman cómo nos sentimos, nos vemos y envejecemos. Cuidar la salud desde adentro, más allá de lo visible, es una de ellas.

Aunque poco conocido fuera del mundo científico, el NAD —Nicotinamida Adenina Dinucleótido— está ganando notoriedad en el mundo del bienestar por una razón muy clara: es una coenzima esencial que habita en todas las células de nuestro cuerpo. Derivado de la Vitamina B3, el NAD participa en algunos de los procesos más importantes de nuestro organismo: producción de energía, función mitocondrial, reparación del ADN y salud metabólica.

¿La ciencia detrás? Al activar proteínas llamadas sirtuinas, el NAD influye directamente en la longevidad celular, la resistencia al estrés oxidativo y la regeneración interna. No es solo teoría: cuando los niveles de NAD están óptimos, todo en el cuerpo funciona con mayor fluidez.

¿Para qué sirve realmente?

• Mejora la energía celular y reduce la fatiga.
• Promueve la reparación del ADN dañado por la edad o el entorno.
• Favorece el funcionamiento saludable de las mitocondrias.
• Estimula el metabolismo y el equilibrio hormonal.
• Fortalece el sistema inmune.
• Contribuye a un envejecimiento más saludable, tanto por dentro como por fuera.
• Si estás pasando por la perimenopausia o la menopausia este es el         suplemento que necesitas.

Además, su impacto no se limita a la vitalidad interna. El NAD protege el tejido muscular, combate el desgaste celular, y puede ayudar a prevenir la flacidez, la celulitis y el deterioro que muchas veces atribuimos solo al paso del tiempo, pero que en realidad responde a un cuerpo que necesita regenerarse.

Si a esto le sumamos una buena hidratación, descanso, actividad física y una fuente adecuada de proteínas como Protein Plus, la sinergia es poderosa. Juntos, estos nutrientes pueden ayudarte a alcanzar tus objetivos diarios de proteína, conservar tu masa muscular y, al mismo tiempo, regenerar y proteger tus células.

¿Por qué empezar ahora?

Tomar suplementos como el NAD no es un acto de vanidad, sino de prevención. Es decidir que no vas a esperar a sentirte cansada, inflamada o desconectada para hacer algo al respecto. Es elegir la vitalidad como estilo de vida.

Incorporar vitaminas o coenzimas a tu rutina diaria puede marcar una diferencia profunda en cómo te sientes contigo misma. No se trata de seguir una tendencia, sino de escuchar a tu cuerpo y darle lo que necesita para funcionar en su mejor versión.

Y si estás lista para ese paso, fórmulas como Be-Care Life, que combinan NAD con colágeno hidrolizado, ofrecen una alternativa confiable y efectiva para acompañarte en ese proceso.

Porque cuando nutrimos nuestras células, transformamos nuestro presente… y también nuestro futuro.

Regina Becerra