¿Por qué exfoliar la piel?

Diariamente, tu piel desprende miles de millones de células cutáneas. Una forma de ayudar a desprender estas células y mejorar su calidad y textura, es la exfoliación. 

Exfoliar tu cara y cuerpo, permitirá que las células se regeneren mejor, que tu piel se hidrate, se vea y sienta tersa y suave, además de evitar puntos negros, vellos enterrados y zonas resecas y agrietadas. Existen exfoliantes mecánicos y químicos, algunos mecánicos, son por ejemplo: avena, azúcar, café, extractos naturales de semillas como nuez, almendra, entre otros más. Dentro de los químicos, están los llamados AHA’s y BHA’s, y otros más ligeros como los exfoliantes enzimáticos.

Después de que exfolies tu cuerpo y/o cara, es muy importante que aportes hidratación a tu rutina, de esta manera podrás nutrir la piel nueva y evitarás que se irrite o se enrojezca. Existen tratamientos de cabina muy completos y especializados que pueden renovar tu piel, como los ENVOLVENTES CORPORALES, que son tratamientos donde se exfolia todo el cuerpo y se aplica una mascarilla hidratante y regeneradora, para posteriormente terminar con una hidratación y un leve masaje que activa la circulación corporal. 

MUST KNOW!

Debes saber que, los exfoliantes de cuerpo no pueden ser los mismos para tu rostro, debido a que son texturas, necesidades y grosores completamente distintos, por lo que te recomendamos acudir con tu cosmiatra experta para que te oriente sobre cuál te va mejor y cada cuanto tiempo puedes exfoliarte.