Gaslighting: El fenómeno de manipulación en la pareja

Cuando pensamos en relaciones tóxicas o en algún tipo de violencia en una relación, solemos pensar en agresión física, faltas de respeto, celos extremos, control… pero, ¿sabes qué es el gaslighting? 

El gaslighting es una forma de abuso psicológico que consiste en manipular la percepción de la realidad del otro. El término se origina en la obra de teatro del mismo nombre en 1938, para después convertirse en película en 1944. En esta trama, un hombre manipula algunos objetos de su casa para hacer creer a su mujer que está loca, haciéndola dudar hasta de ella misma con el fin de quedarse con su fortuna. Hoy en día, el término “gaslighting” se utiliza para identificar esta conducta tóxica de manipulación en las relaciones. 

La persona que abusa psicológicamente, manipula de tal manera que se duda del criterio propio, generando angustia, ansiedad, falta de autoconfianza, baja autoestima, etc. 

Hay tres etapas en las que se da este fenómeno. En la etapa de idealización, la persona se muestra a sí misma como encantadora, amable, perfecta, y muestra todas sus cualidades. Por lo general, se da en parejas, pero esto también puede darse en relaciones laborales, familiares o amistades. 

La etapa de devaluación sigue de la idealización. Aquí la víctima pasa de ser adorada a ser devaluada, dejando una sensación de “no haces nada bien”, por lo que busca volver a sentirse adorada por el abusador. En la etapa de descarte, empiezan los problemas con mayor frecuencia; el abusador ya no se preocupa por arreglar las cosas, a lo mucho compensa. Hace sentir culpable a la víctima y responsable de los problemas en la relación. 

Algunas frases que puede usar el manipulador son: 

«Qué exagerada».

«Yo no hice eso».

«Te estás enojando por nada».

«Otra vez te estás confundiendo».

«No hagas dramas».

Las personas que se encuentran en una situación de gaslighting no saben si en verdadestán “exagerando” o si lo que perciben es real o no. Este tipo de abuso psicológico y emocional resulta mucho más difícil de identificar y salir del mismo. 

Ahora que ya conoces las señales del gaslighting, puede que te sea más factible identificar posibles foquitos rojos. Si no te sientes cómoda en tu relación, si crees que de alguna forma te manipulan y llegas a dudar de ti misma, ¡pide ayuda!