Yoga como sanación
Salud, Wellness¿Alguna vez algún doctor, llámese de cualquier rama, te ha recomendado practicar Yoga? A veces nos preguntamos en qué nos ayudará el yoga a sanar, ya sea males externos, internos o mentales.
En esencia, se puede decir que el Yoga es una práctica de sanación. Fue creada para guiarnos a conectar con lo que somos y así ampliar la conciencia.
La primera etapa de la práctica consiste en una limpieza y purificación profunda en todos los niveles. Hay tres partes de lo que nos conforman como individuos que necesitan ser abordadas para quitar lo que sobra o no pertenece.
- El cuerpo físico: Se desarrollaron las asanas (posturas) para desintoxicar el cuerpo y abrir los canales energéticos.
- El cuerpo energético: Se trabaja a través de la respiración, esta es nuestra herramienta más directa para manejar la energía vital. La respiración y las posturas trabajan en conjunto para desbloquear el cuerpo y la energía.
- El cuerpo mental: El trabajo interno siempre va acompañado de la observación para así darnos cuenta de qué necesitamos limpiar. Con la práctica, la mente se va entrenando a mantenerse enfocada y concentrada en el presente, en el aquí y el ahora y mantener las fluctuaciones de la mente aquietadas.
La constancia de la práctica acompañada de pranayama y meditación hace que encontremos un equilibrio físico, emocional y mental; el cuerpo va cambiando en estructura, fuerza y flexibilidad haciéndonos sentir en un espacio más seguro dentro del cuerpo en el que habitamos.
La respiración (pranayama), energía vital, es la parte más importante en la práctica y de nuestra vida; es la vida que nos mantiene y si trabajas en ella podemos lograr una vida más saludable mental y física, con menos enfermedades respiratorias, ansiedad, depresión, enojo, frustración o pensamientos autodestructivos.
La respiración puede hacer un cambio enorme y aquí entramos a la meditación, la cual nos ayuda a eso, a calmar los pensamientos, a autorregular tus emociones, a generar bienestar desde la mente hacia nosotros mismos. Empezando desde el cuerpo físico hasta el cuerpo mental, desde el estado meditativo y en autobservación puedes generar un estado de salud física y mental sano.
¿Cuántas veces hemos leído o escuchado que la mente tiene la fuerza y la voluntad de mover montañas? Nosotros tenemos la capacidad con la mente de autosanación o regulación de nuestras emociones.
Una meditación no necesariamente tiene que ser prolongada, puedes llevarla al inicio desde 5 a 10 minutos. Encontrar ese estado en el que los pensamientos pasan y no se estacionan para distraer tu mente es el control de estar presente pero en calma.
Y todo esto es una pequeña parte de lo que el yoga puede sanar:
- Reduce presión arterial y frecuencia cardiaca
- Mejora la coordinación
- Ayuda a mejorar la digestión
- Libera tensión muscular
- Fortalece y tonifica tu masa muscular
- Previene y alivia el dolor de espalda
- Reduce el estrés y la ansiedad
- Refuerza tu sistema inmune
- Ayuda tener una óptima regulación hormonal
- Mejora la sintomatología de la menopausia.
Y así puedo describirte muchos, pero lo más importante es aprender a conectar contigo mismo, no con el cuerpo físico, ¡ayudarte a ser una persona más feliz, empática y compasiva!
Dime qué temas quieres que abordemos en relación al yoga que te gustaría saber desarrollar o profundizar!
¡Om shanti!
Paola Olguín