Año nuevo, boda vieja

Llegó el tiempo de volver a empezar; de desempolvar tu proyecto de boda que renuentemente tuviste que aplazar y mover más de una vez por causas ajenas a tus deseos. Podrás encontrar confirmación de que tiempos mejores se avecinan, como también, evidencia de lo contrario. Sea cual sea tu enfoque de vida o circunstancias actuales, si has esperado lo suficiente para casarte y tu intención sigue latente, sigue estos consejos para retomar las riendas de uno de los días más importantes de tu vida.

Refresca tu lista con ojo observador. Invitado por invitado, asegúrate que estén en tu lista por el motivo correcto, en especial si has decidido reducir el tamaño de tu evento para no correr riesgos de limitantes a corto o mediano plazo. Cuando sepas quién logró seguir en tu lista y quién no, tómate el tiempo de avisar a estos últimos el motivo de la cancelación como una atención y agradecimiento por su intención de haberte acompañado. Un pequeño detalle como galletas o una carta hará maravillas a la hora de cortar estos cabos.

Revisa cotización por cotización, proveedor por proveedor, con el afán de recordar exactamente qué está componiendo tu boda. Te puedes valer de tu wedding planner para que, en conjunto, despejen cualquier duda que hubiese estado latente y que muy probablemente sea tiempo prudente de resolver. Verás que de haber modificaciones a tu proyecto de boda -por tamaño o nueva locación- deberás darte el tiempo necesario para que tus proveedores estén enterados y negocien todos aquellos cambios que sean vitales para la realización de tu boda próxima.

Retoma la emoción. Si eres de esas novias que tras haber vivido semejante año y aplazado tu boda cada vez más, perdió la ilusión de ver realizado este sueño, sumérgete de nuevo en una labor de introspección y recupera los motivos y razones que te impulsaron a dar este paso en primer lugar. Si el amor por la persona que te acompañará en este viaje sigue ahí, ya estás del otro lado: tu boda evolucionó contigo. Y si, por el contrario, tu intención sobre muchas cosas cambió, no seas tan dura contigo misma: esta pandemia sacudió las vidas de todos. No eres la única que se ha replanteado sus objetivos e intenciones de vida; lo menos que puedes hacer es ser honesta contigo misma, en especial si la vida te ha concedido un nuevo año para empezar de cero.