Finanzas y espiritualidad

Antes de comenzar, me gustaría plantearles una pregunta reflexiva: 

¿Creen que el dinero provoca emociones en las personas?

Muchos se sentirán incrédulos al leer que finanzas y espiritualidad están relacionadas, ya que existe la creencia de que las personas espirituales no piensan en dinero y que solo lo hacen las personas materialistas…

Sin embargo, el dinero y la espiritualidad se llevan muy bien y, cuando se combinan, pueden aportar grandes beneficios a nuestras finanzas personales. Después de todo, todos deseamos alcanzar la tan ansiada libertad financiera, y una mentalidad positiva dirigida hacia ese objetivo será uno de los motores más importantes que tenemos.

Vivimos en un sistema capitalista en el que incluso las personas más adineradas tienen problemas de salud financiera o, al menos, preocupaciones al respecto. Una mentalidad de escasez de dinero es aquella en la que predominan creencias limitantes, como que no existen recursos financieros suficientes y que nunca podremos acceder a la verdadera abundancia. Esto genera estrés y ansiedad, lo que impacta directamente en nuestra salud mental.

A continuación, te dejo algunas prácticas que puedes utilizar para iniciar una práctica espiritual financiera:

Visualización: Si deseas aumentar tus ingresos, comienza con ejercicios de visualización por las mañanas, justo después de despertar. Imagina la persona en la que deseas convertirte, cómo se ve, qué hizo para llegar allí y cómo se siente. Con la práctica constante, atraerás gradualmente esos cambios.

Dedica tiempo a tus finanzas: Establece un día a la semana para revisar tus números personales. Esto incluye crear tus propios estados financieros, celebrar cualquier nuevo logro financiero que hayas obtenido y reflexionar sobre cómo mejorar la gestión del dinero y realizar los cambios necesarios.

Aleja los pensamientos negativos: Evita sabotear tu abundancia con pensamientos negativos. Busca actividades que te hagan sentir bien y acércate a personas que hayan alcanzado el éxito financiero que deseas. Aprende de sus experiencias.

Pide ayuda: Si te sientes perdido en algún aspecto financiero, busca un mentor. En la actualidad, hay mucha información gratuita y de fácil acceso que puede ayudarte.

Gracias.