La herramienta que me sacó de mi peor crisis
Autoguía, WellnessMe dedico a mover la energía y, en mis sesiones, he sido testigo de muchos testimonios que respaldan la eficacia de esta terapia. Sin embargo, no estaba consciente del grado de contribución que tendría para mí.
Nací y crecí en la ciudad de Acapulco hasta los 18 años, donde vive toda mi familia: mis padres, hermanas, abuelos y muchos amigos de la infancia que aún residen allí.
La noche del martes 24 de octubre en particular, estaba inquieta, pero realmente no tenía idea de los días que se avecinaban. El miércoles 25 de octubre desperté con la noticia en la televisión de que un fuerte huracán había golpeado la ciudad. Siendo honesta, en Acapulco estamos acostumbrados a las lluvias, temblores y huracanes, pero esto fue un nivel de destrucción sin precedentes.
En ese momento, me comuniqué con muchas de mis amigas foráneas. Nuestros corazones estaban unidos a los de nuestras familias. La comunicación se perdió totalmente; todas intentábamos sin parar marcar, enviar mensajes de texto y usar WhatsApp, esperando que en algún momento nos leyeran. Sin embargo, pasaron las horas y los días, y aún no habíamos podido contactar con ellos. El ruido y el caos colectivo eran a veces ensordecedores, se decían muchas cosas, pero al mismo tiempo no se sabía mucho.
Me obligué a poner en práctica todo mi entrenamiento, todas las herramientas que he aprendido desde los 16 años. No te voy a mentir, fue una de las cosas más difíciles que he tenido que enfrentar. Sentía frustración, tristeza, enojo, muchas emociones revueltas. Había mucha información y desinformación. Lo primero que hice para calmar mi mente fue pedirle a mi esposo que me corriera las Barras. Recuerdo que le dije: ‘Por favor, dame Barras’, y esto lo estuvimos haciendo todos los días.
En ese momento, me sumergí en la cama durante 60 minutos y me obligaba a recibir. Era como si vaciara mi mente y terminará con una sensación de relajación profunda, como un abrazo al alma. Al finalizar la sesión, tenía mucha más claridad mental y podía elegir con mayor facilidad. Podía navegar los comentarios de otras personas sobre la situación, pero sobre todo, podía tener una energía alta y elevada para enviar a mi familia.
Bendigo la herramienta porque me recordaba que podía elegir diferente cada 10 segundos, tomar acción inspirada cada 10 segundos. No sabes cuánto agradezco tener esta herramienta de Barras de Access que me ayudó a surfear una tempestad que llegó sin previo aviso y de un momento a otro.
Si esto se creó en la peor crisis de mi vida. Imagina, ¿qué va a crear para ti? ¿Qué más es posible?
Laura, tu Facilitadora Energética
Redes Sociales: @lauradambla